El 30 de enero voló sobre su ala delta,
intrépido y valiente como siempre.
El 20 de marzo planeó un momento más sobre nosotros
y se dejó envolver por las manos de roca de su querida tierra,
hecho cenizas,
polvo blanco desapercibido sobre la piel de la montaña...
porque él ya había llegado a Folegandros,
allí donde me dijo que nos volveríamos a ver,
"Ja saps, la plaça on hi reposa el Món"

Hola cariño
ResponderEliminarQue vuele alto. Espero que estés bien y que la despedida haya sido fácil. Bello retrato.
Un abrazote de Sara viajando
Seguro que está volando y se parará en el PArral a recoger astillas y a hacer flexiones de brazos en la barra del pasillo.
ResponderEliminartu gury, mil besos
Que bonito Silvia............
ResponderEliminarTú y yo sabemos que ahora están bien...juntos.
Cuidaros mucho..
Besos de tu prima.
Aire al aire, tierra a la tierra y agua al agua.Naturaleza muerta que da vida a la viva,y vivos que dan vida a la muerta.
ResponderEliminarAsí es el ciclo de la vida y así deberíamos aceptarlo.
Pero la ausencia duele y amor retiene. Solo el paso del tiempo todo lo difumina y dulcifica, hasta que exhaustos nos aferramos al recuerdo de lo que fue y de lo que queremos que siga siendo,y la ausencia de lo querido lo plasmamos en un cuadro que cobra vida cuando lo miramos.
Un abrazo de Juanjo, Inés y Nieves